Implementamos un experimento de campo aleatorio en Malawi para examinar las respuestas de los prestatarios a la toma de huellas dactilares al solicitar préstamos. Esta intervención mejoró la capacidad del prestamista para implementar incentivos de pago dinámicos, lo que le permitió retener préstamos futuros de morosos anteriores y recompensar a los buenos prestatarios con mejores condiciones de préstamo. Como lo predijo un modelo simple, la toma de huellas dio lugar a tasas de reembolso sustancialmente más altas para los prestatarios con el mayor riesgo de incumplimiento ex ante, pero no tuvo ningún efecto para el resto de los prestatarios. Brindamos evidencia única de que esta mejora en las tasas de reembolso va acompañada de comportamientos consistentes con una selección menos adversa y un riesgo moral más bajo.