Vacunación infantil es una de las intervenciones de salud pública más exitosas y rentables hasta la fecha, previniendo aproximadamente entre 2 y 3 millones de muertes cada año y una grave morbilidad para millones de niños más debido a enfermedades devastadoras como la polio y el virus de la hepatitis B. Si bien se han logrado avances sustanciales en la inmunización infantil a nivel mundial, la cobertura aún está rezagada en muchos países, lo que deja a millones de personas vulnerables a las enfermedades. Un desafío particular reside en la demanda: incluso cuando las vacunas están disponibles, muchas personas no las aceptan ni las reciben (aplicación). Las intervenciones orientadas a la demanda se centran en las barreras para la aceptación y la aplicación, como el desconocimiento del calendario y los beneficios, la baja prioridad de la inmunización, los obstáculos financieros o la desconfianza en la vacunación. Estas intervenciones solo tendrán un impacto positivo en contextos donde la cadena de suministro de vacunas y los servicios de salud no sean las principales barreras para la vacunación. En este informe, Innovations for Poverty Action ha recopilado evidencia sobre intervenciones orientadas a la demanda para aumentar la inmunización infantil en países de ingresos bajos y medianos (PIBM).