Los investigadores, en colaboración con el IPA, están examinando el impacto de la migración en el desarrollo de la primera infancia de los niños que han experimentado la migración, ya sea a través de su propia migración o de la de sus padres.

En los últimos años, la migración de América Central a los Estados Unidos ha aumentado, con grandes caravanas de miles de migrantes que viajan desde América Central a través de México para llegar a los EE. UU. A pesar de un cuerpo sustancial de literatura sobre el impacto de la migración de los padres en los niños que se quedan atrás, las diferencias entre la migración parental permanente y temporal en los resultados de los niños siguen siendo un área crítica pero poco explorada. Estos diferentes tipos de migración influyen fuertemente en las expectativas de los padres sobre el valor de invertir en la educación de sus hijos, lo que a su vez afecta los resultados educativos de los niños. 

Para abordar la comprensión limitada del impacto de la migración en el desarrollo de la primera infancia, los investigadores y el IPA están llevando a cabo un estudio para comparar el desarrollo de los niños que han experimentado la migración, ya sea a través de su propia migración o de la migración de sus padres, con un grupo de niños muy similar que no han experimentado la migración pero que, en promedio, son muy similares. En colaboración con el Ministerio de Educación de El Salvador, los investigadores realizarán una encuesta censal exploratoria para identificar hogares para el estudio. Ambos grupos de hogares (aquellos con niños que han experimentado la migración y aquellos que no) completarán una encuesta telefónica para evaluar el desarrollo de los niños. Esto se complementará con una referencia cruzada de datos administrativos relacionados con las puntuaciones de las pruebas y las pruebas estandarizadas para encontrar relaciones entre el desarrollo cognitivo y la migración de los padres.

Se esperan los resultados de este proyecto en 2025.

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