Este artículo considera varios aspectos de la toma de decisiones económicas de los pobres desde la perspectiva de la economía del comportamiento y se enfoca en las contribuciones potenciales del marketing. Entre otras cosas, los autores consideran algunas facetas relevantes de los entornos sociales e institucionales en los que interactúan los pobres, y revisan algunos patrones de comportamiento que probablemente surjan en estos contextos. Una perspectiva más informada desde el punto de vista del comportamiento puede ayudar a dar sentido a lo que de otro modo podría considerarse “rompecabezas” en el comportamiento económico de los pobres. Un análisis de comportamiento sugiere que cambios sustanciales en el bienestar podrían resultar de intervenciones políticas relativamente menores, y el marketing perspicaz puede proporcionar una ayuda muy necesaria en el diseño de tales intervenciones.