En todo el mundo en desarrollo, los ciudadanos desconfían de la policía y dudan en llamar su atención sobre los delitos, un equilibrio subóptimo que dificulta que la policía combata eficazmente el delito y la violencia. La policía comunitaria se ha promocionado como una solución a este problema, pero la evidencia sobre su eficacia en contextos de países en desarrollo es escasa. Presentamos los resultados de un experimento de campo a gran escala que asignó al azar una intervención policial comunitaria local a las comisarías de Uganda rural. Basándonos en datos administrativos sobre delincuencia y cerca de 4,000 entrevistas con ciudadanos, agentes de policía y autoridades locales, mostramos que la policía comunitaria tuvo efectos limitados en los resultados principales, como la delincuencia, la inseguridad y las percepciones de la policía. Atribuimos estos hallazgos a una combinación de rotación, incumplimiento del tratamiento y limitaciones de recursos. Nuestro estudio llama la atención sobre los límites del potencial de la policía comunitaria para reducir la delincuencia y generar confianza en el mundo en desarrollo.