Varios experimentos de campo encuentran rendimientos positivos de las subvenciones para microempresarios hombres y no para mujeres. Sin embargo, estos análisis pasan por alto en gran medida que los microempresarios masculinos y femeninos a menudo pertenecen al mismo hogar. Usando datos de ensayos aleatorios en India, Sri Lanka y Ghana, mostramos que la brecha de género en el desempeño de las microempresas no se debe a una brecha en la aptitud. En cambio, se observan rendimientos medios bajos de las empresas dirigidas por mujeres porque el capital de las mujeres se invierte en las empresas de sus maridos y no en las propias. Cuando las mujeres son las únicas operadoras de la empresa doméstica, los choques de capital conducen a grandes aumentos en las ganancias. Los aumentos de ingresos a nivel del hogar son equivalentes independientemente del sexo del beneficiario de la subvención o del préstamo.