Efectos sociales en la era de las finanzas digitales
La transición de servicios financieros informales y grupales a servicios financieros digitales formales e individuales puede tener algunas consecuencias no deseadas, como la reducción de los efectos positivos vinculados a la presión social. Un posible remedio a este problema son los mensajes SMS. Más allá de su capacidad para traer objetivos financieros a la “en la parte superior de la mente”, los mensajes SMS pueden ser herramientas digitales eficientes y efectivas para construir y mantener los efectos positivos de la presión social.
Hay evidencia de varios países (Kenia, Afganistán y India, por ejemplo) que los servicios financieros digitales (DFS) pueden ser un medio eficiente, asequible y escalable para aumentar la inclusión financiera y mejorar la vida de los pobres. Sin embargo, aún existen desafíos importantes para lograr el uso sostenible que se traduzca en un impacto positivo en el bienestar. Como se señaló en esta publicación de blog de IPA, algunos de estos desafíos se relacionan particularmente con la reducción de los efectos sociales que conlleva la introducción de tecnologías digitales, como los teléfonos móviles y los teléfonos inteligentes. Aunque las finanzas digitales pueden facilitar el acceso a los servicios financieros a las personas que se encuentran en la base de la pirámide, estas nuevas formas de financiación también pueden tener resultados no deseados, como menor ahorro y pago de deuda morosa, a través de la reducción de la cohesión del grupo y la disminución de la presión social. Si bien se necesita más evidencia sobre esto, es importante tener en cuenta estas posibilidades al desarrollar herramientas y servicios digitales para los más pobres del mundo.
Tomemos el ejemplo de los grupos de pares en las microfinanzas. Tradicionalmente estos grupos se han apoyado en dos pilares fundamentales para su funcionamiento: la responsabilidad solidaria y los efectos sociales. La evidencia ha demostrado que la 'responsabilidad conjunta' no siempre es necesaria para lograr un comportamiento financiero saludable (Gine y Karlan, 2010). Por otro lado, el sociales Los efectos que tienen estos grupos tienden a promover tasas más altas de ahorro y reembolso. Esto ha sido bien documentado en la literatura académica (Dupas y Robinson 2013, Breza y Chandrasekhar 2016y breza 2012). Para muchas instituciones de microfinanzas, esto ha proporcionado una buena justificación para mantener los grupos de pares como un componente central del modelo de operación. Sin embargo, los rápidos cambios que han tenido lugar en el espacio de las finanzas digitales plantean preguntas como, ¿cómo podemos mantener los beneficios vinculados a la presión social mientras hacemos la transición a una forma de finanzas digitales basada en el individuo?
La evidencia de una serie de estudios sugiere que las características cuidadosamente diseñadas integradas en las plataformas de servicios financieros digitales pueden ofrecer una oportunidad para mantener y aprovechar los beneficios de la cohesión/presión social inherente al modelo tradicional. Una herramienta simple a disposición de un diseñador de productos son los mensajes SMS. Investigación previa realizado por IPA ha demostrado que los mensajes SMS pueden ser herramientas poderosas para combatir la procrastinación y ayudar a las personas a cumplir sus objetivos. Más recientemente, los resultados de estudios similares indican que los mensajes SMS podrían replicar algunos de los resultados que tradicionalmente se han relacionado con diversas formas de efectos sociales. Por ejemplo, Kast, Meier y Pomeranz (2016) encontró que los mensajes de texto de retroalimentación pueden lograr efectos de tamaño similar en los ahorros que otras formas de presión social (reuniones, recompensas o presión de grupo). De manera similar, en Kenia, un programa piloto de 14 días mostró que los mensajes SMS que comparaban los ahorros de las personas con los de ahorradores ligeramente mejores aumentaron los ahorros en un 11 por ciento (CGAP, 2017). Mientras que otro estudio, también en Kenia, encontró que los mensajes SMS que probaron el 'efecto entre pares' bajo la plataforma de préstamos entre pares Pesa Zetu lograron tasas de reembolso más altas que otros tipos de SMS (CGAP, 2017).
“...los mensajes de texto pueden lograr efectos de tamaño similar en los ahorros que otras formas de presión social (reuniones, recompensas o presión de grupo)”.
Los mensajes o notificaciones cuidadosamente diseñados que refuerzan y replican algunos de los mecanismos de efectos sociales pueden tener un impacto importante en el comportamiento financiero de los usuarios de los servicios financieros digitales. Sin embargo, hay una serie de preguntas que surgen al pensar en pasar a un entorno de finanzas digitales basado en el individuo. ¿Cómo se pueden integrar los aspectos positivos de la presión social y la cohesión en el diseño del producto? ¿Qué mecanismos y características de diseño generan el mayor impacto en la salud financiera? ¿Son las formas digitales de presión social más rentables que otros métodos más tradicionales para generar impacto?
Actualmente, IPA está asociada con la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro de México (CONSAR por sus siglas en inglés), la Administradora de Fondos de Pensiones de Colombia (Colpensiones), o el Banco Interamericano de Desarrollo probar el impacto de diferentes marcos conductuales de SMS, incluida una estrategia de presión social, sobre los ahorros para la jubilación en México y Colombia. Esta investigación puede contribuir a ampliar el cuerpo de evidencia sobre las características sociales que pueden hacer que los SMS sean los más efectivos para promover un comportamiento financiero saludable. Los resultados de estos y otras evaluaciones puede ayudarnos a comprender los ajustes de diseño y las características necesarias para allanar el camino hacia una transición sin problemas a las finanzas digitales que preserve los beneficios de los efectos sociales.
Miguel Ángel Jiménez Gallardo es investigador asociado sénior en IPA. Se unió a IPA en 2017 y actualmente trabaja en temas relacionados con la inclusión financiera, el ahorro a largo plazo y los empujones de comportamiento.